Archivos Mensuales: febrero 2016
Cómo nos manipulan los gobiernos
por BBC MUNDO.
Unos meses después de que Saddam Hussein invadiera de Kuwait en 1990, la opinión pública estadounidense estaba dividida, y se inclinaba más hacia la no intervención.
El presidente George Bush había fijado un plazo límite para que el ejército de Irak se retirara del suelo kuwaití, y ya estaba en conteo regresivo.
Fue entonces que una fotogénica niña de 15 años llamada Nayira se presentó frente a un grupo de congresistas y dio un vívido testimonio de la brutalidad de las tropas iraquíes.
Uno de los más escalofriantes detalles en su relato tenía lugar en uno de los hospitales kuwaitíes donde estaba de voluntaria y -aseguró- fue testigo de cómo «los soldados sacaron a los bebés prematuros de las incubadoras, se llevaron las incubadoras y dejaron a los bebés muriéndose tirados en el frío piso».
«Lo puedes encontrar en Google», le dijo a BBC Mundo James Garvey, autor de «The Persuaders: The hidden industry that wants to change your mind» (Los persuasores: La industria oculta que quiere cambiar tu opinión).
«Dura unos 3 minutos y todavía es un testimonio poderoso«.
Sus palabras reverberaron en los medios internacionales y esa historia fue repetida varias veces por los senadores, incluso el día del voto que decidió que EE.UU. estaba en guerra.
La misteriosa Nayira
«El resultado de la votación fue estrecho -una diferencia de unos cinco votos- y esa historia probablemente contribuyó a inclinar la balanza a favor de la guerra».
Fue después que se supo que la misteriosa y elocuente joven era realmente la hija del embajador de Kuwait en Washington, que nunca había estado en el mentado hospital, que su discurso había sido redactado por un turbio grupo de cabildeo vinculado a la monarquía kuwaití y que la historia de las incubadoras no estaba basada en hechos.
«Siempre es importante ser cuidadoso y tratar de no sonar como un teórico de la conspiración, ¡pero en este caso realmente hubo una conspiración!».
A pesar de que todo esto salió a la luz, ya no importaba.
«Era demasiado tarde. Este tipo de cosas sólo tienen que ser efectivas por un período de tiempo específico».
«Y a menudo, incluso si sabemos quién fue responsable, es difícil identificar el crimen cometido. Eran mentiras, pero los políticos después dijeron que eso no quería decir que hubiera sido incorrecto intervenir, aunque quizás parte de la información que tenían fuera errada».
Los que nos representan
«En un mundo perfecto, nos imaginamos a los gobernantes exponiendo los hechos y diciéndonos qué piensan, y luego, basándose en nuestra respuesta, actuando», señala Garvey.
«Lo que generalmente pasa es que los gobiernos hacen lo que les parece y luego urden el consentimiento de la gente, en algunos casos manipulando el lenguaje para que sus decisiones suenen más aceptables».
En otros casos, como el ejemplo de la guerra contra Irak, afectando la percepción de un país entero posicionando ideas específicas, valiéndose de técnicas de publicidad.
Y hay firmas de relaciones públicas dirigiendo el espectáculo, apunta el autor, quien además es el editor de The Philosophers’ Magazine.
No tan sinónimos
El de Nayira es uno de los ejemplos más notorios de manipulación de opinión pública pero, nos dice Garvey, no es aislado.
«Una de las cosas más comunes pero que me siguen sorprendiendo, por su gran poder, es «framing«, que es la idea de que ciertas palabras pueden enfatizar un aspecto particular de un concepto. Ese énfasis da paso a líneas específicas de pensamiento».
«Piensa en palabras como: refugiado o migrante. Cada una evoca una imagen distinta en tu imaginación.
«El primero, está huyendo de un peligro, probablemente una guerra, y hay que tenderle la mano. El segundo llegó probablemente en busca de una mejor situación económica».
«En EE.UU. hay una diferencia entre un indocumentado y un inmigrante ilegal«.
Usando las palabras más convenientes, los gobiernos pueden dirigir a la gente en una dirección particular.
Garvey citó un estudio del US General Social Survey en el que le pidieron a la gente que evaluara el gasto en diferentes sectores de la Economía. Pero iban cambiando las palabras.
«Por ejemplo, algo así como el 20% pensaba que se gastaba muy poco enasistencia social. Pero si lo cambiaban a «asistencia a los pobres«, ese porcentaje aumentó a cerca del 60%«.
Bestias y guerras
Uno de los ejemplos con los que varios países de Latinoamérica están muy familiarizados es con la guerra contra las drogas.
Podría haber sido una campaña contra las drogas o un tratamiento para el problema de las drogas.
«Eso me hace recordar otro estudio interesante en el que a un grupo le describieron el crimen en la ciudad como una bestia y al otro le dijeron que el crimen es como un virus infectando a la ciudad».
«Los que escucharon la metáfora de la bestia, inmediatamente pensaron que la solución era la aplicación de la ley y cárceles; a los que se los presentaron como un virus, sugirieron reformas sociales».
«Así, si se declara una guerra contra las drogas, eso te da la posibilidad de hacer todo tipo de cosas: es una guerra. Pero uno no hace estallar cosas si está haciendo un ‘tratamiento'».
Qué se puede hacer
«Yo creo que cuando se trata de la manipulación del gobierno, entre más consciente esté uno de lo que está sucediendo, más fácil es resistirlo».
«Cuando yo escucho a un político, no lo tomo muy en serio, porque sospecho que un relacionista público lo instruyó a decir cosas como ‘elecciones justas y libres’ o ‘libertad’ o lo que vaya a provocar en los que lo oyen la reacción deseada».
O, sabiendo todo esto, uno puede escuchar a los políticos y leer entre líneas.
«Es cierto. Si lo puedes ver como realmente es, puedes preguntarte ‘por qué está diciendo eso, por qué de esa manera’ y tener una idea de qué le preocupa».
Fuente: http://www.bbc.com/mundo/noticias/2016/02/160218_gobiernos_manipulan_trucos_finde_dv
¿Sirven para algo los títulos de economista?
por BBC Mundo.
En muchas universidades británicas, algo está ocurriendo con la «ciencia lúgubre», como a veces se le llama despectivamente a la economía.
Los estudiantes de economía están molestos por lo que se les está enseñando y la forma como se está haciendo.
No sólo están protestando, están haciendo algo al respecto.
El movimiento parece haber comenzado en Manchester en 2010.
Muchas departamentos universitarios de economía recibieron un notable aumento en las solicitudes de estudiantes potenciales como resultado de la enorme crisis financiera que estalló en 2008.
Según los nuevos estudiantes, estaban alarmados por el mundo en el que estaban viviendo. Querían saber más sobre la crisis y sobre lo que podían hacer para evitar otra.
Así que se inscribieron en la carrera de economía. Pero la enseñanza que recibieron los dejó frustrados y sorprendidos.
Dicen que casi no hubo mención sobre la crisis, o sobre la sacudida tan grande que sufrió el mundo.
Poca «diversidad»
La típica enseñanza de economía en la universidad, decían, se concentra en un modelo económico que ignora casi totalmente los altibajos que ellos han experimentado como estudiantes.
¿Se debe enseñar la obra de Karl Marx en los cursos de licenciatura de economía?
Y agregaron que quienes les enseñaban eran especialistas que se concentran en el concepto teórico que imagina que las personas siempre toman decisiones racionales y óptimas cuando se enfrentan con problemas enormes o pequeños.
Las matématicas eran frecuentemente parte central de la enseñanza de economía. Y se ignoraba la forma extraña e impredecible como la gente se comporta, así como las muchas otras escuelas de pensamiento económico.
En particular (y para un ignorante económico como yo esto parece especialmente extraño), hay muy poca o ninguna referencia a la historia de la economía.
Las lecciones del pasado sólo enseñaban si éstas reflejaban los actuales modelos económicos.
Parece como si el pasado no hubiera ocurrido o no hubiera tenido un impacto en la forma como la materia se enseña o debería enseñarse.
Preocupados por todo esto, algunos estudiantes pidieron una reunión con el Sindicato de Estudiantes de la Universidad de Manchester.
No hubo una enorme participación, sólo cinco de ellos. Pero esos cinco fueron suficientes para provocar el inicio de algo llamado Sociedad de la Economía Postcrisis.
Empezaron a atraer multitudes cuando comenzaron a reunirse de forma periódica para escuchar a oradores hablar sobre las cosas que sentían estaban siendo irgnoradas en sus cursos universitarios.
No sólo llegaban estudiantes de economía sino también de otras disciplinas de ciencias sociales.
¿Tiempo de repensar?
Al principio los organizadores se sintieron fortalecidos por el apoyo de alguien poco usual: el Banco Central de Inglaterra.
La Sociedad de Economía Postcrisis de la Universidad de Manchester tiene su propia página web.
En 2012 el Banco organizó una conferencia bajo el impactante titulo: «¿Cumplen con su propósito los graduados en economía?»
¿Están preparados para hacer el trabajo que las empresas y departamentos gubernamentales desean de sus nuevos empleados recién graduados?
La Sociedad de Economistas Empresariales planteó una pregunta similar.
Los empleadores también expresaron dudas sobre sus nuevos economistas.
Y esto tuvo eco con las frustraciones de los propios estudiantes. Después de todo estaban pagando costosas matrículas para aprender cosas que sus empleadores potenciales estaban también cuestionando.
El movimiento adquirió fuerza.
Los estudiantes postcrisis en Manchester publicaron un informe bien reflexionado sobre lo que estaba mal con la enseñanza que estaban recibiendo.
En el prólogo, el economista jefe del Banco de Inglaterra, Andrew Haldane, contribuyó con esto a su grito de batalla: «Es momento de repensar parte de las piezas fundamentales de la economía».
Fue algo bastante impresionante.
La Gran Depresión de los 1930 fue un evento clave en la historia de la economía del siglo 20.
El movimiento, organizado localmente, se extendió a muchas universidades en Reino Unido. Y después se unió con estudiantes en otras partes del mundo.
En China, Estados Unidos, Brasil, India, Italia, Turquía, Francia, Alemania y otros países, ahora existen grupos que se reúnen bajo el estandarte de algo llamado «Repensando la Economía».
Estos se describen a sí mismos como una red internacional de personas que buscan desmitificar, diversificar y fortalecer la economía.
La principal preocupación de los «repensantes» parece ser la falta de lo que llaman«pluralidad» en la forma como la materia se enseña.
Como dije antes, en décadas recientes una sola escuela de pensamiento económico, el neoclasicismo, ha llegado a dominar la enseñanza universitaria.
El mundo académico está sujeto a la moda igual que lo están otras profesiones. A pesar de que en ocasiones ha aspirado a ser una ciencia dura, las ideas económicas dominantes van y vienen.
De la izquierda a la derecha
Durante algún tiempo esto parecía estar implícitamente reconocido en la forma como el Premio Nobel de Economía parecía ser otorgado: un año a un seguidor de JM Keynes, y el otro a un simpatizante de las fuerzas de mercado inspirado por las opiniones monetaristas de Milton Friedman.
Como caricatura, el péndulo oscilaba de la izquiera a la derecha y de vuelta otra vez.
La crisis financiera que comenzó en 2008 no se estudia en muchos grados universitarios.
Pero la idea del pluralismo va más allá de la caricatura. Muchos estudiantes quieren escuchar sobre la aplicación de otros enfoques distintos en la economía: sobre la escuela marxista, Schumpeter, la clásica, la escuela austriaca, la keynesiana, la conductual, la economía del desarrollo.
A algunos les gustaría incluir algo llamado economía feminista.
En respuesta al desafío de los estudiantes, las facultades de economía de las universidades argumentan que están cambiando parte de su enfoque.
Algunos están volviendo a admitir la historia de la economía en sus programas, una inclusión muy bien recibida.
La crisis financiera que comenzó en 2008 no se estudia en muchas licenciaturas de economía.
Y una o dos universidades, dispuestas a hacerse de renombre, están haciendo lo que parecen ser grandes cambios en su enseñanza.
La Universidad de Londres introdujo un nuevo currículo. Las universidades inglesas de Leeds, Greenwich y Kingston han estado llevando a cabo restructuraciones de gran escala en su enseñanza económica.
Algunas universidades ya incluyeron en sus programas la historia de la economía.
Mientras tanto, a diferencia de muchas otras iniciativas estudiantiles que rápidamente se evaporan, este movimiento parece estar adquiriendo fuerza.
Dentro de poco aparecerá una página web de economía muy accesible y dirigida al público general, no sólo a estudiantes. A fines de este año habrá un libro sobre este asunto.
Todo esto te hace pensar si acaso los estudiantes que ahora están trabajando juntos para Repensar la Economía han logrado elaborar un nuevo modelo económico o educativo para sí mismos, y todo esto por pura frustración.
Se han sentido tan molestos por lo que pensaban que no se les estaba enseñando que han decidido organizarlo por sí mismos. Podría decirse que esto es la diversidad, lograda por otros medios.
Y esto importa porque las ideas económicas afectan todas nuestras vidas. Y para lograr un mundo mejor, es necesario entenderlas.
Fuente: http://www.bbc.com/mundo/noticias/2016/02/160205_finde_economia_titulos_economistas_utilidad_men
Manual de la Autogestión: Volúmenes del 1 al 4, por Arno Klenner y Luis Razeto
A continuación compartimos los 4 volúmenes del Manual de la Autogestión escrito por Arno Klenner y Luis Razeto.
1.- Manual de la Autogestión Vol 1: Qué es y cómo se forma un taller autogestionado?
2.- Manual de la Autogestión Vol 2 : Producción, Financiamiento, Comercialización
3.- Manual de la Autogestión Vol 3 : Administración, Crecimiento, Organización
4.- Manual de la Autogestión Vol 4 : Contabilidad y Estructuración Jurídica
Fuente: http://www.socioeco.org/bdf_fiche-publication-1342_es.html